viernes, 10 de diciembre de 2010

Página 1

Querido Idígoras:

Lo primero, pedirte disculpas por tardar tanto en ponerme en contacto contigo, pero durante esta última semana me han sucedido tantas cosas que tenía que asimilarlas para poder contarlas.

Lo segundo, disculpas de nuevo por establecer mi conexión con Almaw,… pero me pareció adecuado en aquel momento.

Como sé que estás deseando leer algo en ese Diario que tanto miedo te da,… allá voy.

Para empezar, mi conexión con Almaw fue fantástica, única… y pude compartir con ella parte del Diario aún sin escribir. He confiado y confió en que ella te haya puesto al día sobre lo que descubrió con sus maravillosos poderes, y sobre los pensamientos que pasean por mi cabeza.

Durante esta semana, por las noches, como siempre, no he podido dormir, e intentando ponerme en tu lugar y acoger tus poderes en mí, me veía,... me veía a mí, vagando por la playa. Era algo extraño porque yo era transparente y alrededor de mí vagaban varios espíritus, suplicándome que les dejara venir conmigo a pasear.

Entre esos espíritus reconozco rostros, rostros de personas que significan o han significado mucho para mí. Pero yo he decidió seguir mi viaje sola, sin compañía a quien dañar o a quien hacer feliz. Debo darme cuenta y decidir qué quiero hace con mi vida.

Varios espíritus me piden perdón, me piden que les deje acompañarme durante toda la vida… diciéndome que les deje hacerme feliz. Pero,… realmente Idígoras, solo hay un espíritu que me importa… y casualmente es él el que menos me mira, me habla o me pide acompañarme. Solamente observa, observa desde el fondo como me alejo y agacha la cabeza.

En ese momento mis viajes mentales terminan y me encuentro como siempre… en el gran mundo de la S azul... Vagando entre palabras que me cuestan leer por las lágrimas…

La otra noche contacte con el espíritu, me habló y volví a sentirlo traspasarme,... pero todo era de un modo diferente, raro, distinto,… Había cambiado la relación entre nosotros y eso se notaba. No sé, todo fue muy extraño.

Para terminar, decirte que espero que la reunión del día 20 fuera fantástica, y que debatierais temas muy interesantes. Además quería comentarte que te doy permiso para escribir en mi diario, al igual que a Almaw. Así cuando yo me ponga con él,… veré todo lo que queréis contarme.

Sin más… un saludo y un beso enorme y dale besos a Almaw,

Asj.